Astrónomos captan una galaxia conocida como el “rostro de Dios”
Astrónomos lograron obtener imágenes detalladas de la galaxia NGC 1316, apodada como el “rostro de Dios”, descubrimiento hecho a través del telescopio VLT (Very Large Telescope, por sus siglas en inglés), instalado en el Observatorio del desierto de Atacama, al norte de Chile.
Por su parte, el Observatorio Europeo del Sur fue el encargado de divulgar la imagen.
La galaxia NGC 1316 es la constelación Fornax (el horno), es un ejemplo típico de colisión de nebulosas que genera nuevas estrellas y las transforma desde dentro.
El estudio de ese fenómeno puede ayudar a los científicos a saber por qué algunas galaxias “mueren” rápidamente después de ese tipo de choques.
Anteriormente se consideraba que la NGC 1316 había experimentado una sola colisión con otro cúmulo de estrellas hace unos 3 mil millones de años. Más tarde, los científicos descubrieron que en realidad lo que había pasado es que el “rostro de Dios” se había tragado toda una serie de pequeñas galaxias.
Esas colisiones se extendieron y “mezclaron” las nubes de gas dentro de la NGC 1316, lo que provocó el nacimiento de muchas estrellas cuya radiación hizo brillar de una manera especial las acumulaciones de gas y polvo.
Uno de los efectos de esa reacción fue la aparición del brumoso NGC 1316.
Fuente: novedadesaca.mx
Por su parte, el Observatorio Europeo del Sur fue el encargado de divulgar la imagen.
La galaxia NGC 1316 es la constelación Fornax (el horno), es un ejemplo típico de colisión de nebulosas que genera nuevas estrellas y las transforma desde dentro.
El estudio de ese fenómeno puede ayudar a los científicos a saber por qué algunas galaxias “mueren” rápidamente después de ese tipo de choques.
Anteriormente se consideraba que la NGC 1316 había experimentado una sola colisión con otro cúmulo de estrellas hace unos 3 mil millones de años. Más tarde, los científicos descubrieron que en realidad lo que había pasado es que el “rostro de Dios” se había tragado toda una serie de pequeñas galaxias.
Esas colisiones se extendieron y “mezclaron” las nubes de gas dentro de la NGC 1316, lo que provocó el nacimiento de muchas estrellas cuya radiación hizo brillar de una manera especial las acumulaciones de gas y polvo.
Uno de los efectos de esa reacción fue la aparición del brumoso NGC 1316.
Fuente: novedadesaca.mx